EA 816 - La increíble red de contactos de los dueños del laboratorio del fentanilo

Jueces, intendentes y funcionarios. La increíble red de contactos de los dueños del laboratorio del fentanilo mortal y un negocio sin control

Ariel García tejió relaciones y vínculos con el poder para mantener su imperio


Ariel García Furfaro y Cristina Kirchner

Lo que sucedía dentro de los laboratorios HLB Pharma y Ramallo, apuntados por las muertes de fentanilo contaminado, dependía de un esquema de protección exterior. Los hermanos García, dueños de los establecimientos, contaban con una red de contactos políticos y judiciales tan frondosos y aceitados que es difícil determinar el papel de cada eslabón. Unos ayudaban a evitar inspecciones, otros frenaban los cierres de las empresas y había también quienes conseguían contratos con el Estado. Así operaron en las sombras durante años. La investigación judicial ahora también apunta a desvíos de drogas al mercado ilegal.

Ariel García tejió su telaraña de contactos muchas veces a través de conocidos. Un amigo al que le pide que le presente a otro. También a través de promesas a políticos, como la de instalar plantas farmacéuticas en Catamarca, o tendidos eléctricos con los cables de su empresa Epuyén en Chubut. Con esos proyectos entró en contacto con el gobernador Ignacio Torres, a través de su abogado, Gastón Marano, quien habría volado en su avión privado, o con el catamarqueño Raúl Jalil, a quien conoció a través de su hermano, Andrés Jalil, uno de los grandes patrones de la medicina en la provincia norteña.

En Chubut, ante las consultas de LA NACION, rechazan que el vuelo de Marano haya existido.


Gastón Marano - Facebook

García invitaba a visitar el laboratorio a políticos. Por allí han pasado desde Emilio Pérsico, dirigente del Movimiento Evita, hasta el propio Nicolás Kreplak, ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires y hermano del juez que entiende en la causa, Ernesto Kreplak. El ministro estuvo, por última vez, en diciembre.



Emilio PérsicoAlejandro Guyot - LA NACION

Sin embargo, una de las visitas frecuentes a HLB Pharma era Freddy Lijo, hermano de otro juez, Ariel Lijo. El operador solía ir al laboratorio de San Isidro a buscar ampollas de fentanilo para sus caballos. Conoció a los García a través de su compartida afición por la equitación, devenida en negocio.


El hermano del juez Lijo llegó a la empresa en 2014

Ambos tienen studs de caballos de carrera, y suelen cruzarse en el Hipódromo de San Isidro, en donde García le ha prestado, en ocasiones, instalaciones para sus animales. Luego de las visitas, donde incluso se llegaron a hacer medicamentos gratuitos para los visitantes, García y Lijo almorzaban en un conocido restaurante: 1000 Rosa Negra, en la Avenida de la Unidad Nacional, con vista privilegiada al Jockey Club San Isidro.


Club de campo San Diego

Uno de los emisarios que golpeaban puertas en nombre de Alfarma, HLB y Laboratorios Ramallo, las tres principales empresas de salud del García Furfaro, era José María Olazagasti. El hombre fue un verdadero paladar negro del despacho de Julio De Vido en sus 12 años como ministro kirchnerista, tiempo en el que se desempeñó como secretario privado. “El Vasco”, como le dicen, fue un ladero fiel del jefe de la cartera de Planificación Federal y se encargó de varios negocios, entre ellos, la relación con la Venezuela de Hugo Chávez, tarea que compartía con Claudio Uberti.

Dos fuentes contaron a LA NACION que Olazagasti, procesado en el caso Cuadernos, se apersonaba en varios centros de salud pública, nacionales, provinciales o municipales, y pedía que le pasen los millonarios contratos de provisión de medicamentos que se canalizarían por la droguería del grupo, Alfarma. Luego, las negociaciones seguían en un domicilio de la calle Arias al 4100, en el barrio de Saavedra, un verdadero bunker donde ahora funciona un lujoso salón de belleza. Ese, además, es el domicilio de la Consultora C&O, una empresa cuyo socio es Nicolás Olazagasti (hermano de José María). Esa relación se habría enfriado en el último tiempo.

García también cultivaba vínculos en reuniones a su casa. Por allí pasaron desde el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, que es vecino del empresario en el country San Diego, en Moreno, como Raquel Méndez, esposa del exministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollán y Daniel Mautone, uno de los pesos pesados del juego en la Argentina. Ella también trabajaba en Anmat, el organismo que debía controlar el fentanilo. A través de ese cargo viajó a Rusia en pandemia por la Sputnik V, al igual que HLB Pharma.

En 2020, dieron con el negocio de la venta al Estado. Le adquirieron a Carlos Tita, uno de los grandes proveedores de medicamentos en Santa Fe, la droguería Alfarma.

Esta empresa ya tenía el esquema de licitaciones públicas armado. Por lo tanto, si HLB y Ramallo le vendían a Alfarma, y Alfarma, a su vez, le vendía a las provincias y municipios, el circuito estaba armado. A veces se hacía con precios bajos para garantizarse la contratación del Estado y otras, como en el caso de Jose C. Paz, con sobreprecios, según la documentación revisada por LA NACION.

Las adquisiciones para el distrito de Mario Ishii las gestionaba Sebastián Nanini, un abogado, apoderado de la lista del intendente de José C. Paz, que apareció sorpresivamente como presunto comprador del laboratorio, tan solo semanas antes de que explote el caso de la contaminación.

A través de su influencia, Nanini gestionaba para los García vínculos con asociaciones ligadas a la Justicia. En mayo del año pasado, Nanini fue el coordinador de un seminario sobre Ciberdelito en Latinoamérica y Estados Unidos. Lo organizaban la Asociación Argentina de Justicia Constitucional y The American University. 

Se hizo un viaje a Washington en donde estuvieron presentes García, Nanini, Marano y un listado de jueces y fiscales. Fueron: Javier López Biscayart (juez nacional en lo Penal Económico), Alfredo Gusman (camarista), Ricardo Mianovich (juez federal de Sáenz Peña), Alejandro Maraniello (juez civil), María Florencia Budiño (presidenta del Tribunal de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires), Ulises Giménez (secretario Permanente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados Y Funcionarios de la provincia de Buenos Aires), Patricio Sabadini (fiscal en Chaco), Marcelo Martínez Burgos (fiscal de instrucción), Roberto Fernando Minguillón (juez del Tribunal Oral en lo Criminal Federal), Martín Poderti (juez de Cámara del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Mar de Plata), Eduardo Bucca (senador provincial de Unión por la Patria) y Mario Kohan (presidente del Tribunal de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires). Los asistentes no necesariamente mantenían una relación personal con García, pero este tipo de eventos muestra el esfuerzo que realizaba el empresario y su gente para tender vínculos con el poder.


Almuerzo con jueces y fiscales en Washington

No es el único abogado con extraños vínculos alrededor de García. Actualmente, el representante en la causa por el fentanilo contaminado es Gastón Marano. Se trata de un exasesor de la Comisión Bicameral Permanente de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia y defensor de “la banda de los copitos”, acusados por el intento de homicidio a Cristina Kirchner. Marano también fue un nexo clave para las gestiones de los laboratorios en Anmat, el organismo cuya desidia -en el mejor de los casos-, habilitó la existencia de las fabricas durante años. Marano llegó a tener un contrato de locación de servicios en el organismo a raíz de su vínculo por HLB y Ramallo.

La familia García tiene muchas empresas y propiedades. Una de ellas es la casa donde vivió Diego Armando Maradona, en Villa Devoto. La adquirió por unos US$900.000 y fue noticia por abrirla al público para ver la final del mundo. También se la alquiló (a un valor simbólico, por lo que era mayormente un préstamo) a Roberto García Moritán durante su campaña a jefe de Gobierno porteño, en la que se presentó como parte del equipo a Fernando Burlando. Fuentes cercanas al excandidato dijeron que la idea era que, en una eventual gestión, convertirlo en patrimonio histórico. Sin embargo, según aseguran, Moritán nunca conoció personalmente a Ariel García.

El empresario de HLB Pharma también se cruzó con Cristina Kirchner. El último encuentro registrado fue en el Instituto Patria, en abril de 2024. Tuvo una audiencia privada con ella que quedó plasmada en un video subido por la propia expresidente, aunque ahora ya no aparece en sus redes.


Cristina Kirchner y detrás, Ariel García Furfaro, en el Instituto Patria

Ariel García es el hermano que comenzó con el emporio de negocios que luego incluyó a sus hermanos, Damián y Diego García Furfaro. Su crecimiento económico y en la escena política se dió entre 2016 y 2017. Entre esos años, explotó el armado que comenzó a gestarse una década antes en Rosario, cuando Ariel García se une al Laboratorio Apolo, empieza a defender como abogado recién recibido a implicados en el caso de la efedrina y de la mafia de los medicamentos, y pasa de tener un Volkswagen Fox anaranjado a una flota de autos. En 2016, después de la presunta explosión de una caldera en Apolo, logra la compra del laboratorio Ramallo (donde se produjo el fentanilo contaminado) a la familia Araujo, abogados de los acusados en la explosión.

Es ahí cuando empieza su crecimiento meteórico. En los comienzos, se obsesionó con la producción de anestésicos, medicamentos que en realidad no dan grandes márgenes de ganancia. La pregunta es si todo se vendía en el canal formal o si la morfina y otros componentes químicos tenían “mermas” (producción que no se puede distribuir) tan grandes como la del fentanilo (cerca de un 24%) y si eso “perdido” no llegaba a otros compradores ilegales.

Con el tiempo, García se dio cuenta que el negocio era la venta al Estado. Compró, sucesivamente, tres droguerías: Droguería Mayorista, ABC1 y la última, Alfarma. A las dos primeras, las fundió por deudas fiscales y las abandonó. Es posible que la AFIP haya sido benevolente con sus problemas ya que el gerente de la sucursal a la que le correspondían todas sus empresas, por la dirección en donde las inscribían, era su primo.

Con algunos hizo negocios. Víctor Santa María, dirigente del sindicato de porteros y empresario de la comunicación, adquirió varios medios con fondos cuyo origen, según una decena de fuentes del sector, pertenecían a García Furfaro. Compró, como contó LA NACION, Los 40 Principales (105.5FM), Continental (590AM) y el sitio IP Noticias. Y así llegó a los medios de comunicación.

Fecha  : 5 de julio de 2025 - 03:16 horas
Por Camila Dolabjian y Diego Cabot
Fuente : La Nacion

https://www.lanacion.com.ar/politica/jueces-intendentes-y-funcionarios-la-increible-red-de-contactos-de-los-duenos-del-laboratorio-del-nid04072025/



Los sugestivos vínculos de inteligencia que unen al dueño del laboratorio del fentanilo con el caso de los audios

García Furfaro hizo alusiones a la Suizo Argentina antes de ser detenido; su relación con Toviggino, a quien el Gobierno acusa de “operar” con las grabaciones sobre Karina Milei


García Furfaro, detenido por la Policía de Seguridad Aeroportuaria

Casi al mismo tiempo golpearon en la agenda pública dos crisis de magnitud. Ambas ligadas a medicamentos, droguerías y poder político. Con días de diferencia, detuvieron al dueño de HLB Pharma por la causa del fentanilo mortal y adquirieron notoriedad los audios de Diego Spagnuolo (extitular de la Agencia Nacional de Discapacidad), en los que hace referencia a un entramado de coimas vinculado a la droguería Suizo Argentina, Karina Milei y los primos Menem. Una sugestiva conexión vincula a los protagonistas de los dos casos.

Ariel García Furfaro guardó silencio por meses ante la noticia sobre la contaminación en sus productos que lo tiene detenido en el penal de Ezeiza. Hace unas semanas, sorpresivamente, comenzó a dar entrevistas y declaraciones en las que apuntó a una hipótesis: el sabotaje. En un principio, se refería a la posibilidad de que el fentanilo se haya adulterado a propósito, pero a medida que pasaron los días, su teoría se profundizó a otro aspecto: que lo dejaron solo. Pero, ¿quién?

Tan solo antes de su detención, García Furfaro dijo en una entrevista en TN: “¿Sabés que me ofrecieron a cambio de solucionarme todo? El que analiza mi producto no es la ANMAT, es un laboratorio privado que es amigo de los Menem, que no tienen nada que ver. ¿Sabés quién me mandó a los servicios de inteligencia? La SIDE berreta que maneja Caputo (vino) a decirme: ‘Explotá a los Menem y yo te levanto el pie del acelerador’”. Algo similar dijo minutos antes de entregarse en el aeropuerto de Ezeiza, mientras era trasladado por su abogado, Gastón Marano.

En reiteradas oportunidades, García Furfaro le dijo a LA NACION que creía que el escándalo público existe porque su entramado perdió protección. Apuntó a que detrás de que eso suceda estaban miembros de la inteligencia argentina ligados al Gobierno. Si bien conspirativos, sus dichos revelan una certidumbre y abren una pregunta.

Lo primero: el dueño de HLB admite que él y sus negocios estaban en contacto con los sótanos de la política nacional. Acusa del supuesto boicot a un exempleado llamado Andrés Quinteros, a quien le adjudica trabajar para los servicios de inteligencia.

Lo segundo: HLB Pharma operó durante años en la oscuridad del amparo del poder y logró sortear que estallen escándalos similares al del fentanilo, como el que sucedió con la contaminación corroborada en ampollas de dexametasona producidas por él. ¿Qué cambió?

Una buena parte de las relaciones políticas que construyó la familia García se sustentaron en su pertenencia a un selecto submundo. Son un puñado las personas dueñas de más de cien caballos de carrera, como los que tiene el empresario. Se ven seguido, cuando sus studs compiten en los hipódromos de San Isidro o Palermo. En ese contexto conoció a Ignacio Jiménez y comenzó a darle, como favor, grandes volúmenes de medicamentos para los equinos, que demandan mucha droga y suero para su recuperación.

“Nacho”, como le dicen, es uno de los miembros del riñón de Jaime Stiuso que logró penetrar en el nuevo esquema de la AFI. Trabaja con recelo pero en aparente concordancia con la influencia que adquirió Leonardo Scatturice, acercado a Santiago Caputo por Manuel Vidal. Su padre, ligado a la gestión de depósitos fiscales, y asociado a la importadora Megaton SA. Él, uno de los eslabones clave entre la ex SIDE y la Asociación de Fútbol Argentino (AFA). “Representa” jugadores de fútbol. Y otro de sus puntos fuertes: el control sobre la Triple Frontera.

Más conocido que su nombre es el de su restaurante “Il Ombu -Trattoria Italiana”, inaugurado en 2020. Está ubicado en Parque Patricios. La AFA y el Chiqui Tapia suelen hacer reuniones, cenas y festejos allí. Es un lugar muy concurrido por el círculo rojo.

Frecuentemente, y en particular los jueves por la noche, García Furfaro solía ir a comer a ese restaurante. Uno de sus acompañantes usuales era Víctor Santa María, con quien compartió negocios especialmente vinculados a los medios, con la adquisición de IP Noticias y Radio Continental. El líder del gremio de los porteros controla una gran cantidad de emprendimientos, entre los cuales tiene hoteles en Foz de Iguazú, Misiones. También una farmacia para el sindicato en el Microcentro, a la que le proveía comprimidos García Furfaro.

Otro punto curioso sobre el restaurante. Días después de que las modificaciones tributarias a la industria del tabaco fueran retiradas de la Ley Bases, una cámara empresaria formuló una denuncia penal en la Justicia por supuesto cohecho agravado, incumplimiento de los deberes de funcionario público, evasión, lavado de activos y otros delitos que pudieran surgir. Acusó pago de coimas y aportó una dirección. Dijo que el intercambio se realizó el 15 de febrero, a las 14 horas, cuando habrían llegado un vehículo Chery y un Ford Mondeo gris a un garaje ubicado en Caseros al 3000. Casualmente, se trata del estacionamiento del restaurante Il Ombú.

Quienes elucubran a esta hora la asociación en el submundo político apuntan como pista el lugar se dieron a conocer estos audios. Fuentes cercanas al triángulo de hierro aseguran que conocían la existencia de estos audios hace meses y les resulta llamativo el medio que los difundió. Carnaval Stream tiene detrás a Pablo Toviggino, tesorero de la AFA y presidente del Consejo Federal. Toviggino y Jiménez asistieron varias veces a la vieja casa de Diego Armando Maradona en Villa Devoto que García Furfaro compró en 2022.


Pablo Toviggino, la mano derecha de Claudio “Chiqui” Tapia en el manejo de los fondos de la AFA

Jiménez y García Furfaro se veían frecuentemente. A veces, en el laboratorio HLB en San Isidro. En una ocasión, un sábado de fines de 2023, sufrieron un choque camino a Maipú adonde se acompañaron a realizar la compra de un restaurante.

En Paraguay, donde el dueño de HLB Pharma tejió en los últimos años fuertes vínculos con la cúpula de Horacio Cartes, hay sospechas sobre contrabando vía Triple Frontera. LA NACION accedió a información relativa a el caso de un caballo de carrera. Un purasangre, conocido como Acteon en la Argentina, perteneciente a los García, apareció con días de distancia bajo el nombre de Arielo, en Paraguay. No existen registros de despachos ni permisos en Senacsa (el Senasa paraguayo).

A diferencia de lo habitual en los purasangres de carrera, este caballo no presentaba un chip. La última carrera de Acteon en Argentina ocurrió el 1 de marzo de 2024. Posteriormente, el 28 de abril de 2024, García Furfaro estuvo presente en el Hipódromo en Paraguay. En Paraguay, el caballo, bajo el nombre de Arielo, figuraba a nombre de Sergio Godoy en las planillas del hipódromo y participó en carreras. Se trata de una persona de íntima confianza de Cartes. La incógnita es cómo logró García Furfaro llevar un caballo vía terrestre sin control de ninguna aduana.

Quien patrocina a García Furfaro en esta causa es Gastón Marano, más conocido por su defensa a los copitos en el expediente que investiga el intento de homicidio contra Cristina Fernández de Kirchner. Su relación data de años. Marano ha trabajado en temas de espionaje. Por ejemplo, fue asesor de la Comisión Bicameral Permanente de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia. Entró bajo la recomendación del actual gobernador de Chubut, Ignacio Torres, cuando era senador de Pro.

Fecha  : 4 de septiembre de 2025 - 03:30 horas
Fuente : LA NACIÓN
Por : Camila Dolabjian

https://www.lanacion.com.ar/politica/los-sugestivos-vinculos-de-inteligencia-que-unen-al-dueno-del-laboratorio-del-fentanilo-con-el-caso-nid03092025/



Fentanilo mortal: la caída de un imperio que disfrutó de los vínculos políticos y judiciales

Los García Furfaro tenían relaciones con el poder y se valían de esa influencia para producir, vender y ganar millones con poco control



Detuvieron a Diego García Furfaro

La historia de los García Furfaro empezó a cambiar cuando la diligencia de un profesional del Hospital Italiano de La Plata comenzó a detectar algún patrón similar en algunas muertes que no se explicaban. Todas habían sido medicadas con fentanilo de HLB Pharma. Pasaron más de 100 muertes y la Justicia decidió la detención de los dueños del laboratorio, entre ellos Ariel García Furfaro.

La caída de este imperio conformado por HLB, Laboratorios Ramallo y la droguería Alfarma significa mucho más que la detención de los responsables de producir la sustancia. Lo que ha sucedido es que esos gestores de la salud perdieron la protección judicial y política con la que llegaron hasta acá.

Es verdad que la detención de los Furfaro era algo que muchos descontaban dada la magnitud del caso, pero no menos cierto es que nadie llega donde ellos lo hicieron, a manejar millones, a expandir sus negocios en otros rubros y a ser proveedores predilectos de muchas administraciones públicas sin un fuerte sistema de emergencias y sin una red de vínculos que le permitan operar de manera sospechosa.

No es posible hacer negocios en un mercado regulado al extremo, como el de los medicamentos, sin tener aceitado el engranaje de las firmas que autorizan. Es decir, está bien que el que produjo la sustancia sea culpado, pero los grados de responsabilidad en los que los dejaron operar también se deben investigar.

Esa red de miradas cómplices se posaba, puntualmente, en Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), un organismo descentralizado que se encuentra dentro del ámbito del Ministerio de Salud de la Nación. El organismo, autárquico y con jurisdicción en todo el país, es quien dejó que el fentanilo llegara a cada terapia intensiva a la que llego. Alguien, o varios, tuvieron alguna mirada nublada cuando controlaron a los laboratorios de García Furfaro.

Además, cuando las primeras víctimas aparecieron, no hubo la diligencia debida ni tampoco la comunicación necesaria como para que el opioide mortal no sea individualizado inmediatamente.

El agua siguió su curso hasta que un centenar de muertes movilizaron a una opinión pública que miraba las primeras decenas de muertes con total indiferencia. Cuando el tema se hizo tema central en la conversación argentina, pues vinieron las detenciones. Una encuesta realizada por Poliarquía, y publicada por LA NACION el domingo, dio cuenta que una amplia mayoría cree que los laboratorios que produjeron fentanilo adulterado contaron con protección política para operar sin controles. El el 68% considera “muy probable” que tuvieran esta protección, mientras que el 16% lo ve “posible” y solo 12% no cree que existiera tal situación.

Eso no es todo. Hubo una pregunta concreta sobre la actividad del laboratorio. "¿Cree que hay vínculos entre los laboratorios involucrados y redes de narcotráfico o crimen organizado?”, preguntó Poliarquía. “Sí”, contestó el 68%, y no, apenas el 14%.

Se abre, detrás del escándalo de las muertes por fentanilo, la duda sobre los vínculos de los laboratorios con el narcotráfico. Por ahora está claro qué producían y a quiénes les vendían. Gobernadores e intendentes tienen en sus tesorerías decenas de órdenes de compras a este laboratorio. El país le compraba a los Furfaro que producían a valores muy inferiores a los del mercado ¿Cómo lo hacían? Gambeteadores profesionales de la regulación, los controles, los impuestos y la competencia. Amigos en el poder y una vara de escrúpulos muy cerca del piso.

Pero, más allá de estas causas, pues la red que los lleva a las puertas de los narcotraficantes no es posible dejarla pasar sin investigarla. El fentanilo es la nueva epidemia de este tiempo en el mundo. Según un informe del Gobierno de Estados Unidos, para graficar el poder de la droga utilizó una comparación. La describen como la morfina por 90.

Ese mismo informe dice que con 2 miligramos de droga es posible encontrar la muerte, al punto de que un kilo de droga tiene el potencial de matar a 500.000 personas. El laboratorio HLB aún no puede explicar el faltante de poco más de cinco kilos de fentanilo.

En estos meses que sucedieron desde los primeros casos, los García Furfaro tuvieron tiempo para ocultar pruebas, moverse sin limitaciones, hacer desaparecer evidencias y hasta desviar la investigación con operaciones cruzadas.

Durante el tiempo de la expansión, el clan García Furfaro enlazó vínculos que ahora constituyen una red necesaria para entender el entramado de protección. Ariel García se valió de todo para acercarse al poder. En Catamarca prometió construir una planta farmacéuticas en Catamarca; en Chubut hizo lo propio con un tendido eléctrico con otra de sus empresas, Cables Epuyén, y así llegó a entablar relaciones con los gobernadores Raúl Jalil e Ignacio Torres.

La actividad hípica de los hermanos, era el stud con más carreras corridas en San Isidro en 2024, los llevó a estar cerca de Alfredo “Fredy” Lijo, hermano del excandidato a la Corte, Ariel, a quien le preveía fentanilo para uso veterinario.

Entre su camino estableció cercanía con Lázaro Báez y hasta compartieron el domicilio en algunas sociedades, todas con sede en la casa de la madre de los Furfaro, en un departamento en Caballito.

Llegaron a Paraguay y no anduvieron con vueltas. Fotos con el expresidente Horacio Cartes en su casa y sociedad con el hombre que estaba nominado a ser el embajador paraguayo en Estados Unidos.

Organizó viajes a Estados Unidos para jueces y fiscales y allá los agasajó en grande y dio fiestas de cumpleaños con invitados elegidos. Iban empresarios, jueces, sindicalistas y por supuesto, los políticos que le compraban productos. Fue cercano al poderoso barón del conurbano Mario Ishi y defendió a dos de los narcotraficantes más importantes de la argentina. Y si al álbum le faltaba una foto, la consiguió el año pasado en el Instituto Patria.

Allí inmortalizó el momento con Cristina Kirchner, cuando todavía no existían los debates sobre la tobillera.

Fecha  : 20 de agosto de 2025 - 23:55 horas
Fuente : La Nacion
Por : Diego Cabot

https://www.lanacion.com.ar/economia/fentanilo-mortal-la-caida-de-un-imperio-que-disfruto-de-los-vinculos-politicos-y-judiciales-nid20082025/

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